Educación sexual en la adolescencia: 15 ideas para conversaciones cómodas
Por Rebecca Landry
¿Te parece difícil hablar sobre la sexualidad con tus adolescentes? Quizás no sabes como hacer que sea un momento más cómodo. O no se te ocurre como empezar la conversación de forma natural. La educación sexual en la adolescencia puede ser un reto, ¡pero no tiene por qué ser imposible!
En este artículo, te doy 15 ideas (desde pedir perdón hasta aprovechar las canciones) para sacar temas relacionados con la sexualidad y hablarlos de forma más cómoda. Pero en primer lugar, ¿cuáles son los temas que hay que hablar?
Educación sexual en la adolescencia: ¿De qué hay que hablar?
Cuando se trata de la educación sexual en la adolescencia, no es suficiente una charla que explica como funciona el sexo y fuera. Deberían ser conversaciones frecuentes a lo largo de varios años. Y a lo largo de esos años, ¡hay que hablar de todo! La sexualidad no trata solo de sexo, genitales e infecciones de transmisión sexual. Es mucho más amplio y bello.
En este artículo, no entraremos en todos los temas que serían convenientes comentar con tu hijo o hija. Sin embargo, aquí van algunas ideas:
El cuerpo y los cambios corporales
Higiene corporal
La identidad
El sexo y los genitales
La pornografía y el contenido explícito
La reproducción
Las emociones
La atracción
Los valores y la ética de tu familia
El afecto y el amor
Relaciones y amistades sanas
El consentimiento y la comunicación
La toma de decisiones y el compromiso
Incluir todos estos aspectos de la sexualidad en tu diálogo puede hacer que sean conversaciones más naturales que surgen también en momentos cotidianos. Sabiendo que algunos de los temas sobre la sexualidad pueden ser más difíciles de sacar o más incómodos de hablar, vamos a ver los tips para hacer de esas conversaciones momentos de conexión, amor y aprendizaje con tu adolescente.
15 ideas para conversaciones cómodas
1. Escucha
El primer tip para conversar no tiene nada que ver con hablar: Escucha. Nadie quiere que le sermoneen y mucho menos un adolescente. Escuchar (realmente escuchar) a tu hijo o hija comunica que es importante, que valoras su punto de vista y que quieres saber cómo está.
Acuérdate que la educación sexual no es un sprint, sino un maratón. Tendrás tiempo para hablar. Presta atención y no te precipites al expresar tu opinión.
2. Habla en el coche o andando
Prueba tener conversaciones uno al lado del otro, hombro con hombro, en vez de uno frente al otro. Si no te tiene que mirar a los ojos, podría tener más seguridad a la hora de escuchar o expresarse. Por ejemplo, si tienes coche, es un lugar privado donde estáis uno al lado del otro. Si no tienes coche, podría ser dar un paseo.
3. Cuida tu tono de voz y tus expresiones faciales
A veces lo importante no es lo que dices, sino cómo lo dices. Al hablar del sexo y la sexualidad, intenta transmitir una actitud de amor y tranquilidad para que tu adolescente quiera volver a consultarte con sus dudas.
Esto aplica aún más cuando te cuenta algo que te entristece o te enfada. Cuida tu tono de voz y tus expresiones faciales y regula tus propias emociones. Si necesitas tomar tiempo y volver a la conversación en unas horas (o unos días) para hablar con calma y sabiduría, tómatelo.
4. Haz preguntas
La educación sexual en la adolescencia puede empezar con una simple pregunta. Abrir una conversación con una pregunta comunica que quieres conocer a tu hijo o hija más. Además, te ayuda a entender su realidad, los términos que usa, que es lo que sabe y qué es lo que necesita saber sobre la sexualidad.
Puedes hacer las siguientes preguntas, rellenando el hueco con un tema relacionado con la sexualidad:
“¿Qué opinas de ____?”
“¿Qué dicen tus amigos sobre ___?”
“¿Qué sabes de ____?"
5. Ve una película juntos
Ver una película juntos es una oportunidad perfecta para comentar de forma natural sobre la sexualidad. Aunque las series y las películas no siempre dan perspectivas sanas o realistas sobre las relaciones y el sexo, puedes usar esos mismos ejemplos y escenas para abrir la conversación.
En vez de simplemente dar tu opinión o sermonear, pregunta a tu adolescente qué piensa, qué entiende de la escena o qué opina sobre esa temática. Es una oportunidad para entrenar su capacidad de pensar y analizar, no solamente darle información.
Usa algunas de las siguientes preguntas:
¿Qué opinas sobre _______ (ese tema, esa relación, esa escena)?
¿Qué otras formas hay para manejar esa situación?
¿Te gustaría estar en una relación así? Si no, ¿cómo quieres que sea una relación romántica?
¿Cuál es la perspectiva de la película sobre ___?
¿Qué otra perspectiva (o perspectivas) falta?
¿Qué piensas sobre el mensaje?
¿Es realista el mensaje?
¿Es completo el mensaje?
¿Te gustaría que sea así tu vida real? ¿Por qué sí o por qué no?
6. Aprovecha las canciones
Las canciones también dan pie para hablar de varios aspectos de la sexualidad. Aprovecha las que ya escucha tu adolescente o que ya están sonando por la radio. Por ejemplo, comenta y haz preguntas sobre las letras cuando escuchas la radio en el coche. Usa estos momentos para fomentar el pensamiento crítico de tu adolescente en vez de simplemente sermonear sobre lo que está bien y lo que está mal.
Para una actividad más estructurada, implementa en tu familia un momento una vez a la semana en la cual escucháis juntos una canción y la analizáis.
7. Pide perdón
Si te das cuenta de que deberías haberle hablado de algunos aspectos de la sexualidad antes, no está de más pedir perdón. Puedes empezar la conversación así: “Siento que no hayamos hablado antes sobre (el porno, el sexo, los cambios corporales, etc.). Perdón. Nunca lo hemos hablado, pero me he dado cuenta de que es importante.”
8. Averigua la respuesta
Si te pregunta algo sobre la sexualidad y no sabes bien la respuesta, no tengas miedo de simplemente decir que la vas a averiguar y volverás a hablar de ello. Una vez que tengas la respuesta, dile, “¿Te acuerdas de lo que me preguntaste el otro día? Qué buena pregunta. He aprendido que…”
Si son mayores y es un tema adecuado, ofrece buscar la respuesta juntos. Esto también es un buen momento para hablar de cómo y dónde aprender de forma sana sin meterse en contenido explícito o información incorrecta online.
9. Sé positivo
Ten conversaciones cortas, positivas y cómodas. Esto hace que sea para tu hijo o hija más fácil y atractivo volver a conversar sobre temas de sexualidad. Habla sobre los porqués, sobre la belleza de la sexualidad bíblica, sobre la maravillosa creación del cuerpo humano y sobre el Buen Sexo.
10. Vuelve a la conversación
Acuérdate que la educación sexual en la adolescencia tarda años. ¡No se trata de una sola conversación! No tienes que decir todo de una vez. Si se te olvidó mencionar algo en la conversación previa o quieres volver a hablar el mismo tema, puedes decir “Por cierto, se me olvidó mencionar el otro día…” Así de fácil.
11. Lee libros
Usa libros. Encuentra un libro para ti, para prepararte como padre o madre a afrontar los desafíos y el tema de la sexualidad. Compra libros para leer junto con tu adolescente. O busca libros que le puedes dejar para que lea a solas. Pero ten en cuenta que hojear un libro por sí mismo no sustituye a que pueda contar contigo para charlar sobre la sexualidad.
12. Infórmate
Si no te sientes preparado para dar información acertada sobre la sexualidad, el sexo o los cambios corporales, ¡infórmate! Aprender te da información y también te hace sentir más cómodo a la hora de hablar sobre la sexualidad. Empieza con un curso, un taller, o un libro recomendado por nuestro equipo.
13. Aprovecha los momentos cotidianos
La sexualidad no trata solamente del sexo y al darte cuenta de esto, verás varias oportunidades en el día a día para hablar de ella. Aquí te dejo algunas ideas de momentos cotidianos que puedes aprovechar, junto con un ejemplo de un tema que podría salir de ese momento:
Embarazos de familiares y amigos (¿Cómo es la reproducción?)
Los hermanos pequeños y los baños (Anatomía y quién te puede tocar y dónde)
Ir al médico (Anatomía y quién te puede tocar y dónde)
Los cambios corporales y hormonales (La maravilla del cuerpo humano)
Festivos como San Valentín (¿Qué es el amor verdadero?)
Las noticias (La forma de entender el cuerpo o el sexo; el abuso sexual)
14. Entra en redes sociales juntos
Puedes entrar en redes sociales junto con tu adolescente para hablar sobre los mensajes que se transmiten a través de posts y anuncios. Además, es buen momento para hablar sobre la seguridad online y cómo protegerse.
15. Estate disponible
Hoy en día, estamos corriendo de un lado al otro, con mil actividades para toda la familia. Este ajetreo y prisa no favorece momentos de disponibilidad. Lo ideal es tener un ritmo de vida que provea momentos de tranquilidad en los cuales pueden surgir en familia temas importantes y dudas pendientes. Baja el ritmo e invierte tiempo con tu adolescente para darle la oportunidad de hablar de sus cosas.
Educa y ama a tu hijo o hija adolescente
Aún más importante que la educación sexual en la adolescencia es que tu hijo o hija sepa que le amas. Es valioso para todos los aspectos de su vida y tener confianza además de una base de amor te facilitará las conversaciones sobre la sexualidad.
De hecho, educar en sexualidad es una muestra de amor y un regalo, ya que con esa información tu hijo o hija tiene más herramientas para una sexualidad sana y la prevención ante abuso, pornografía o mal usos del sexo.
En este artículo hemos hablado de informarte, de escuchar, de pedir perdón, de aprovechar de las películas y canciones y mucho más. ¿Qué paso vas a tomar hoy? Ama educando y educa amando.