La pornografía: Cómo estar a la ofensiva en tu hogar
Por Kari Clewett
Cuando trata de prevenir el consumo de pornografía y combatir los efectos nocivos, no podemos ser pasivos. Debemos estar a la ofensiva. No queremos simplemente cruzar los dedos y esperar a ver si el porno aparece o no en nuestras vidas y en la vida de nuestros hijos. ¡Hay que prevenir y nos tenemos que adelantar! Cómo dice nuestra compañera Ale:
Es un acto de amor llegar a la vida de tus hijos antes que la pornografía.
¿Cómo se hace? ¿Cómo puedes proteger a tu familia? Vamos a ver cinco pasos generales y básicos para que puedas estar a la ofensiva y tomar una postura activa en contra de la pornografía.
5 pasos para estar a la ofensiva y proteger del porno
1) Evita el consumo
Puede parecer muy lógico, pero el primer paso para proteger ante el porno en tu hogar es que tú mismo no consumas. Las consecuencias de la pornografía son muchas, ya que contiene un contenido altamente adictivo1, creado para excitar. En este artículo, no voy a entrar en los detalles de los efectos nocivos de la pornografía, pero sí animarte a realizar el curso “Pornografía y mis genitales”.
Solo quiero reforzar lo siguiente: el primer paso para poder proteger a los que te rodean de la pornografía es no consumirla.
Si ya estás en esta situación de no consumo, ¡felicitarte por ese logro y exhortarte a seguir así! Si estás luchando con el consumo de pornografía, te cuento que hay esperanza y que se puede salir. No es un camino fácil, pero pocas cosas que valen la pena lo son. No te desanimes y toma hoy un nuevo primer paso para tomar cargo de esto.
El consumo de pornografía no desaparece con desearlo mucho. En la mayoría de los casos se necesita voluntad, oración y acompañamiento profesional. Hoy en día hay aplicaciones, filtros, libros y programas para acompañarte y para ayudarte a resistir la tentación. Toma acción por ti y por tus hijos.
2) Educa a los niños en la respuesta a la primera exposición
Estar a la ofensiva incluye educar a los niños con antelación en vez de esperar a ver si se encuentran con la pornografía. Lo ideal es prepararlos con una buena base. Esto, por un lado, es para que sepan qué hacer si ven porno (¡huir!). Por otro lado, es para que entiendan qué es la sexualidad saludable (en contraste con las distorsiones que pueden ver en la sociedad, la televisión o el porno).
En los años setenta, el primer acceso a la televisión de un niño en EEUU rondaba sobre los cuatro años, mientras hoy en día los bebés de media con cuatro meses están interactuando ya con media digital.2
Considerando que la pornografía suma el 27% del total del material audiovisual en la media digital,3 la probabilidad de que un niño o una niña se encuentre con pornografía es muy alta. Por eso tienes que preparar a los niños para cuando les llegue la pornografía en vez de “si les llega”.
Si educamos en el Buen Sexo desde niños y jóvenes, será más fácil que eviten e incluso huyan de las primeras exposiciones a la pornografía. (Si no sabes de qué va esto del Buen Sexo, realiza este curso junto a tu pareja o amigos).
Para educar bien en la sexualidad, no hace falta ser explícito o explicar cosas que son demasiadas complicadas para los niños. Hay formas de educar en la sexualidad que son saludables, apropiadas a la edad y útiles. Lo mismo con hablarles a los niños sobre la pornografía.
Herramientas como “gira, corre, cuenta” (explicadas profundamente en el curso “¿Como hablar de pornografía con tus hijos?”) pueden preparar a los niños para tener recursos si otro les expone a alguna imagen indebida o si una imagen aparece en la pantalla de forma inesperada.
3) Habla con los adolescentes
Es posible y muy positivo educar a los peques en la sexualidad, pero si tus hijos ya son adolescentes, no te desesperes. ¡Hoy es un buen día para empezar a hablarlo si aún no lo has hecho!
Muchas veces pensamos que a los adolescentes o a los jóvenes les da vergüenza hablar de sexo o preguntar sobre pornografía, pero en realidad suelen estar haciendo espejo de lo que tú les transmites sobre estos temas. ¿Transmites vergüenza al hablar?
Si nosotros no estamos avergonzados del tema, ¡es más probable que ellos estén interesados en hablar y preguntar sobre ello!
Debemos hablar con honor y respeto sobre el sexo, clarificando que Dios lo creó dentro de un marco específico (que es el matrimonio entre un hombre y una mujer). Cuando inspiramos y motivamos con la belleza del sexo dentro de los límites divinos, eso sacia ciertos aspectos de curiosidad, ayudando al joven a tomar buenas decisiones.
Necesitamos darles fundamento Bíblico y científico de por qué huir de la pornografía o contenido altamente sexualizado. Cuanto más entiendan, mejor se pueden defender ante la presión de sus iguales, y les será más fácil rechazar cualquier exposición a contenido que les puede hacer daño. Para los adolescentes que ya han visto pornografía, podemos ayudarles a entender como es una sexualidad sana y un encuentro sexual sano versus las distorsiones que han visto en el contenido explícito.
4) Establece reglas de la casa
No hay nada que sustituya la educación que puedes dar a tus hijos e hijas. Pero tampoco está de más establecer reglas del uso de dispositivos en tu casa. Por ejemplo:
Dónde se puede usar el móvil o el ordenador
Cuándo o a qué hora se pueden usar
Durante cuánto tiempo al día se puede ver series o estar con el móvil
Qué aplicaciones o contenido se puede visualizar en solitario y que cosas necesitan supervisión
Lo ideal es que las normas que pones se apliquen a cada persona en la familia que tenga móvil o use el ordenador — sí, ¡eso te incluye a ti también! Sé buen ejemplo de un uso responsable de la tecnología. Además, puedes instalar filtros y un software de rendición de cuentas para aún más protección.
5) Fortalece tu matrimonio
Si estás casado o casada, fortalecer tu matrimonio es un gran paso de prevención al consumo de pornografía — para ti, pero también para tus hijos e hijas.
Una pareja saludable que pasa tiempo juntos, que se ama respectivamente y donde cada uno que se siente visto y conocido, va a ser más resistente a recurrir a la pornografía. Invertir en un matrimonio sano y vivo no siempre es fácil, pero siempre será más sencillo que restaurar un matrimonio roto por la pornografía. En el artículo “4 Pasos para fortalecer el matrimonio” hemos detallado pasos específicos que pueden inspirarte.
La conexión que tienes con tu pareja también puede servir de prevención para con tus hijos, ya que ven a sus padres sanos y amorosos y quieren eso para su futuro en vez de lo que podrían ver en el porno.
No esperes
No puedes esperar. Tienes que estar a la ofensiva para proteger a tu familia contra el contenido sexualmente explícito. La pornografía está en todos lados, acechando, buscando, persiguiendo a sus víctimas. Habla a tus hijos (de acuerdo a su edad) sobre las imágenes buenas y malas. Dales herramientas por si alguien les enseña cosas inadecuadas. Saca el tema con tus adolescentes. Toma iniciativa para fortalecer tu matrimonio.
El no consumir y tomar una postura ofensiva es un gesto de amor a tu familia. Hoy (¡ahora!) es un momento increíble para unirte en contra de la pornografía y a favor de tu hogar.
Referencias
1. Fight the New Drug. (2022, agosto 23). Cómo la pornografía puede afectar al cerebro como una droga. Fight The New Drug - Español; Fight the New Drug. https://es.fightthenewdrug.org/como-la-pornografia-puede-afectar-al-cerebro-como-una-droga/
2. Reid Chassiakos, Y. L., Radesky, J., Christakis, D., Moreno, M. A., Cross, C., & Council on Communications and Media. (2016). Children and adolescents and digital media. Pediatrics, 138, 1–16.
3. Childhood 2.0 movie. (s. f.). Childhood 2.0 Is an Essential Documentary That Explores the Unique Challenges Facing Kids Growing up in the Digital Age. Watch Now to Learn from Industry-Leading Experts about Everything from Cyberbullying to Online Predators. Recuperado 3 de febrero de 2024, de https://www.childhood2movie.com/